No los querrás en tu casa

Han matado al Señor Walton. Y ha sido uno de sus invitados. Es tu labor averiguar quién, cómo (que arma utilizó) y por qué. Y para ello vas a contar con la ayuda (y la mala baba) de tus compañeros investigadores.

Ayer me llegó mi "Incómodos Invitados", y se me ocurrió haceros un vídeo de la apertura de la caja; un unboxing que lo llaman ahora (y, tengo que confesar, he incluido el palabro en el vídeo). No esperéis grandes encuadres, ni primeros planos dignos de Spilberg. Es un vídeo de dos manos abriendo la caja de un juego. Punto. Pero vamos, que si me quieren dar el Oscar o la Concha de Oro al mejor corto cutre, no los voy a rechazar, que seguro que quedan bien en el estante entre las miniaturas. Al lío:

Como véis es un juego de cartas. Pero es un juego tipo Cluedo. Os suena el Cluedo, ¿verdad? Para los que no han salido de la cueva en los últimos 30 años, el Cluedo es un juego en el que tienes que resolver un asesinato averiguando quién, con qué y en qué habitación ("Fue el Coronel Mostaza, con la llave inglesa, en la sala de billar"). Bien, pues Incómodos Invitados es similar. Han asesinado al dueño de la casa en su despacho, y tienes que averiguar quién, con qué y por qué. Sí, aquí hay que averiguar cuáles fueron las razones para borrar del mapa a la víctima.

Para llevar a cabo vuestra investigación contáis con un plano de la casa (en una hoja de seguimiento en la que además tenéis indicadas las armas, los sospechosos y sus posibles móviles), un lápiz, unos investigadores compañeros/rivales (los otros jugadores), y un buen montón de cartas con pistas. En los distintos turnos tendréis que intercambiar cartas con los otros jugadores, solicitando información que os sirva para cerrar el círculo alrededor del asesino. Claro, los otros jugadores os podrán dar información más o menos valiosa, dependiendo de lo que tengan en la mano y de qué les interese revelar.
Y, una vez halláis intercambiado cartas (información), tendréis que separar la paja del grano, porque mientras que la policía, el forense, el servicio y los invitados inocentes (¿existe semejante cosa en este juego?) os dirán la verdad, el asesino mentirá sobre dónde se encontraba en el momento del asesinato (obviamente, él o ella estaba en el despacho, matando al Señor Walton), y, si cuenta con un cómplice, éste tampoco será muy sincero que digamos.
Sí, habéis leído bien, el asesino puede tener un cómplice en las partidas más complicadas. Y también tenéis que averiguar su motivación para ayudar al asesino.
Es un juego muy divertido, en el que tienes que darle a la sesera para relacionar unas pistas con otras y quedarte con las buenas, hasta dar con el asesino. La presentación, ya lo habéis visto en el vídeo, es impecable. El juego viene con 30 casos. ¿Pocos? Depende de lo frecuentemente que juguéis. Yo todavía no habré echado ni 10 partidas al Tannhäuser, y mira que hace años que lo tengo (y que me gusta). De todos modos, los chicos de Megacorpin Games (no lo había dicho, son los creadores del juego) están desarrollando una app (un programita para el móvil/tablet) con otras 50 partidas. Ochenta partidas son bastantes, ¿verdad? Pobre Señor Walton, lo que va a tener que sufrir.

Hasta aquí hoy. Si habéis participado en la campaña y tenéis ya vuestra copia, disfrutadla. Si no, el juego se pondrá a la venta a no mucho tardar.

Sed buenos... y cuidaos de a quién invitáis a cenar...

Golem Miniatures, Mai Shiranui y la masilla marrón

Buenas,

Ya os he hablado del Kumite, el juego que emula combates en un torneo de artes marciales. Como seguramente os dije, y si no lo dije se me pasó, podéis haceros vuestros propios luchadores, usando la mini que os plazca y usando el sistema de creación del juego. Como a mí me gustan mucho los videojuegos de lucha, pues decidí hacerme una de mis luchadoras favoritas del King Of Fighters/Fatal Fury: Mai Shiranui. También quiero hacerme a Mila, la española del Dead or Alive, pero tenía una figura base ideal para Mai, y me puse manos a la obra.

Como os cuento, he utilizado una figura ya existente como base. En este caso ha sido la Jess desnuda de Golem Miniatures. Esta es una pequeña empresa francesa con un pequeño catálogo con unas minis muy bonitas. La resina es de buena calidad, y los detalles son muy buenos. El escultor hizo una campaña de crowfunding en las que presentó a sus tres minis estrella: Jess, Lucy y Eva. Cada una en tres trajes: "de cumpleaños", en bikini y vestida. Yo me pillé las nueve minis en cuestión. Por su postura, la Jess en "traje de cumpleaños" era la que menos me gustaba para mantener tal cual. Así que tarde o temprano iba a vestirla, aunque todavía no había decidido de qué. Y tras comprar el Kumite se me ocurrió: de Mai Shiranui.

Jess desnuda. Copyright de Golem Miniatures

Para los legos, Mai Shiranui es un personaje de SNK que hizo su primera aparición en el videojuego de lucha para recreativas y Neogeo Fatal Fury 2. Luego siguió su andadura por el resto de entregas de Fatal Fury y por todas las entregas de King Of Fighters. Aunque cambia un poco su estética de un juego a otro (longitud del pelo, corte del traje, guantes...) en general se mantiene constante en todos los juegos. Os dejo una imagen de la muchacha en cuestión.

Mai Shiranui, KOF 2001.
Sacada de la Wikipedia.

Bien, pues a la tal Jess "sólo" tenía que hacerle la ropa. Aprovechando que había pedido una masilla nueva (masilla marrón o brown stuff) y quería probarla, pues me puse manos a la obra. Empecé por los tabi (los calcetines), y los guantes, y ya luego le hice el... trapito que lleva para tapar las vergüenzas. Sí que es verdad que las telas que lleva a la espalda en mi miniatura son más largas, pero en la edición del KOF'98 llegaban hasta el suelo. El abanico se lo hice de pvc espumado de 1 mm, aplastándolo un poco por la parte en la que se engancha a la mano para que entrara, y tallándolo un poco con la lanceta. Aquí tenéis una foto de la figura ya vestida.

Y aquí os presento la mini ya pintada y lista para repartir estopa.

En cuanto a la masilla marrón, me llamó la atención en cuanto Green Stuff World la puso a la venta, pero no terminaba de decidirme, porque, aunque tengo pensadas cosas que esculpir, prefería ir pintando lo que tengo. Lo de Mai, ya os digo que fue un arrebato. Al final la pedí, junto con una lata de vaselina (de esculpir, no seais mal pensados). Es una masilla blanda, que se trabaja muy bien. Como pega le he encontrado que las partes muy finas que están levantadas "en el aire" tienden a doblarse y asentarse mucho durante el secado. La onda del vestido y la cinta del pelo me dieron mucho trabajo, hasta el punto de que uno de los lados de la cinta se cayó y preferí sustituirlo con masilla gris (más consistente y con menos tendencia a doblarse). Pero una vez secada queda bien dura. Otra cosa que no me gusta es el acabado "con brillantina" final, pero eso con la capa de imprimación desaparece. Como nota adicional, usando la vaselina es mucho más fácil trabajar la masilla de cualquier tipo, porque pierde aderencia y deja de pegarse a las herramientas. Además, la masilla se vuelve algo más maleable bajo el efecto de la vaselina.

Para terminar, os dejo la ficha de luchador de Mai Shiranui (al menos como yo la veo). Mai es rápida, de complexión ligera, no golpea muy fuerte, y tampoco tiene pinta de encajar bien los golpes. He intentado reflejar esto en su ficha, aumentando la Iniciativa, los Reflejos, el Movimiento y los Puntos de Acción más que otros atributos.

Y hasta aquí la entrada de hoy. Espero que os haya gustado. Ya os comentaré cómo funciona la chiquilla en el tatami.

Más Hermanas de Sigmar

Buenas,

Sigo con mi encargo. En el momento de publicar esta entrada me quedan cuatro Hermanas que pintar. Aquí están las otras seis.
Las cuatro últimas me ha llevado demasiado tiempo pintarlas, pero es que con el calor que ha estado haciendo ni paleta húmeda ni ostias; la pintura seca y en menos de dos minutos tan espesa y gomosa que no se podía pintar con ella. ¡Deseando estoy que acabe el maldito verano!
Sí, las dos novicias están muy morenitas "para ser hijas de noble", pero estaba jugando con los tonos de piel para que se diferenciaran un poco más tanta gemela, melliza y trilliza. Hasta que me regañó la dueña y me dijo que las quiere todas rosadas y tal. Digamos que las dos novicias son las que trabajan el huerto del monasterio mientras las otras se hacen curas de belleza a base de sangrados :P

Sed buenos.